viernes, 6 de febrero de 2009

Elecciones

Con motivo de las próximas elecciones gallegas ha surgido un tema que, en función de a que partido se pertenezca, ha dado mucho de que hablar.

El tema es el voto emigrante y cómo han de votar.

En España, para poder ejercer nuestro derecho a voto, hemos de cumplir con una serie de requisitos legales. Estos requisitos se exigen a todos, sin excepción... así para el caso de no llevar el DNI a la mesa electoral, no se nos permite votar.

En el extranjero, aquellos que quieran votar, pueden hacerlo simplemente diciendo que son gallegos. No hace falta que lo demuestren de ninguna manera. Después de todo si se le piden los mismos requisitos que a los de aquí, lo que hacemos en "Violar su derecho a votar"... mientras que si a los de aquí no se les piden estos requisitos lo que hacemos es "Pervertir el decho de voto".

Puede que mi propia conciencia apolítica y anarkista me haga ver fantasmas y chanchullos donde no los haya... pero es que me resulta tan curioso y absurdo que el mismo hecho pueda tener dos vertientes tan distintas en función de la ubicación.

La verdad es que siempre había sospechado que la pertenencia a un Estado otorgaba una serie de derechos superiores a los no pertenecientes a dicho Estado... y ahora resulta que todos los que pagamos los impuestos aquí, que tenemos una vida aquí, que simplemente pertenecemos a este Estado, pues somos seres inferiores a aquellos que por el mero hecho de "decir" que son de aquí pero que ni viven, ni pagan impuestos, ni tan siquiera pertenecen realmente a este país, ya poseen una serie de derechos que los demás no podemos ni siquiera soñar.

Mi opinión a este respecto es que debería eliminarse el voto emigrante... desde el momento en que alguien ya no pertenece realmente a un lugar (y por pertenencia me refiero a vivir y pagar impuestos) debe eliminársele su derecho de elección.

Si quiere elegir, que vuelva.

Después de todo, su visión de la realidad no es correcta, al no vivir aquí, ¿que sabrán ellos de lo que ocurre realmente? Saben lo que se ve en los periódicos, lo que se dice en radio, lo que se cuenta en televisión... o simplemente lo que les dicen los amigos y vecinos. Pero sinceramente, no saben de la misa la media.

Darle la opción de elegir un gobierno (en todas las eleciones gallegas ha existido este voto emigrante como gran baza para elegir al gobierno... antiguamente para otorgarle un mayor poder al PP de Fraga, ahora para darle la victoria al PSOE de Touriño y al BNG de Quintana) a aquellas personas que simplemente votarán lo que les digan, sin saber qué es lo que votan, sin percibir como cambian las cosas con un voto... no es de recibo.

El voto emigrante debería convertirse en el Boto (del gallego "botar: Sacar fuera, eliminar") de aquellos sólo por ser extranjeros se creen superiores (y que los políticos les dan esa superioridad).

Una cosa es el voto por correo (aquellos que por cualquier circunstancia no pueden estar en su circunscripción en el momento de las elecciones), gente que por viajes, por trabajo, por estudios, por vacaciones, o por lo que sea, no pueden votar el día X, pero que realmente viven aquí. Gente que tiene todo el derecho del mundo a votar (y quienes se les exigen aún más requisitos para poder hacerlo que a aquellos que votan el propio día en su mesa electoral).

Otra cosa es el voto emigrante. Aquellos que dan un papelito (el cual previamente ha sido elegido por algún partido político) que viajará a lo largo del mundo, que cambiará el destino de las elecciones en algún remoto lugar del que sólo oyen hablar cada cuatro años. Sinceremente, ¿qué derecho tienen aquellos a cambiar nuestro destino?

Ninguno

Si quieren derechos, que se vengan aquí. Si quieren quedarse allá, pagar impuestos allá... que se olviden de votar, de exigir una serie de derechos que, en mi opinión, han de ser reservados a quienes los merecen realmente.

A los demás... ni agua.

Ya está bien de caridad, pues la caridad ha de empezar con los propios... y las cosas están lo suficientemente mal como para no poder permitirnos ayudar a los de fuera olvidando a los de aquí. Cuando nosotros tengamos derechos, cuando se nos haya dado todo lo que nos corresponde, cuando se hayan arreglado nuestros problemas, entonces será momento de ayudar a los de fuera.

Y punto.

2 comentarios:

Marcos dijo...

Totalmente de acuerdo contigo.
Que conste que daba por supuesto el que para votar desde el extranjero era necesario presentar el dni o pasaporte, cualquier otra alternativa es absurda.
Yo tampoco creo que los emigrantes residentes en otro país deban votar aquí, otra cosa es lo que se está empezando a hacer y es que los emigrantes en España puedan votar en las elecciones municipales siempre y cuando los emigrantes españoles en esos países puedan votar de la misma manera.

Todo esto viene a cuento de que unos partidos políticos ahora y otros partidos antes, han usado el voto de emigrantes muertos para apuntarse tantos. Esta gente debería estar cumpliendo condena por fraude electoral (y por mentirosos).

Mr. Yzquierdo dijo...

Debo estar nuevamente de acuerdo contigo. Aquellos que han elegido vivir fuera de España no deberían poder votar en unos comicios que a ellos les pillan muy de lejos (porque efectivamente no conocen la realidad del país por el cual tienen que ejercer su voto) y eso lleva, en mi opinión, a una especie de "fraude electoral"... votarán a aquel que les haya prometido más sin necesidad de cumplir sus otros deberes como ciudadanos.